Atacama
Chile
El inusual paisaje lunar del desierto de Atacama, con su extraordinaria topografía, fabulosos hospedajes e increíbles posibilidades de excursión, lo dejarán sin palabras. Si sueña con aventuras en lugares remotos, pero disfruta de un toque de lujo, este es el destino ideal para usted; un lugar para pasar días fabulosos, llenos de emociones, en los que se sentirá lejos de la rutina, pero cerca de los condimentos que le ofrecen algunos de los mejores hoteles y guías de Chile.
Probablemente esta región sea uno de los destinos turísticos preferidos del país, completamente preparada para brindar experiencias de viajes de aventura con estilo y confort. El bello pueblito de San Pedro de Atacama emana energía positiva de sus encantadoras calles empedradas. Aunque desborda de turistas, ofrece sin duda algunas fabulosas opciones culinarias en sus muchos cafecitos y exclusivos restaurantes de cocina regional e internacional. Es una delicia pasear por sus calles cuando cae la tarde, pasar por su bonita plaza y ver la iglesia de un rutilante color blanco, presuntamente uno de los edificios más antiguos de Chile. Ya sea que esté en la paz de su posada bajo un cielo estrellado o explorando un paisaje de otro mundo bajo el sol del día, se sentirá muy lejos de la civilización.
Es el sueño de cualquier fotógrafo: esa naturaleza salvaje que nunca acaba atesora placeres inesperados en forma de vigorosos flamencos rosados, géiseres humeantes, volcanes cubiertos de nieve y vegetación verdaderamente extraordinaria. Dista mucho del desierto seco y árido que todos esperan encontrarse. Los volcanes se desparraman en el horizonte, y por encima de este paisaje que parece de otro mundo; por eso nadie se sorprendería si usted preguntara: “¿Dónde he caído?” De hecho, solo lo separa un corto vuelo desde Santiago, la manera más sencilla de llegar.
La inmensidad del desierto alberga infinitas oportunidades para quienes buscan emociones fuertes: embárquese en una aventura 4x4, vuele a caballo por las dunas, disfrute de un baño matutino en un burbujeante géiser o camine hasta uno de los asombrosos volcanes o formaciones rocosas. La salina más grande de Chile, el Salar de Atacama, está a solo 18 kilómetros del pueblo más importante y, además, hay fascinantes aldeas indígenas que vale la pena explorar. Los días tienen un final perfecto que lo invitan a relajarse contemplando los destellos del cielo: se dice que la región es uno de los mejores lugares del mundo para contemplar las estrellas por la maravilla del aire limpio e infinitos cielos nocturnos. Planifique su viaje y ¡prepárese para el disfrute!